22/02/202123:39:56

Debates, ¿Propuestas o descalificaciones?

22/02/202123:39:56

La autoridad electoral en el estado, el IEPCT, aprobó ayer las modalidades de los debates para los próximos comicios y queda ahora en manos de los partidos, los candidatos ofrecer el contenido que permita a los ciudadanos conocer la mejor oferta para emitir su voto convencido, no manipulado y menos engañado.
Precisa el Instituto Electoral y Participación Ciudadana de Tabasco que dará prioridad a la organización de los debates en modalidad virtual, pero fija las normas como respetar los protocolos sanitarios por la pandemia para quienes organicen encuentros presenciales, como los medios de comunicación, instituciones académicas, etc.
Como toda actividad humana sacudida por el covid-19, los debates deben acceder a una “nueva normalidad”, con una confrontación de ideas, proyectos, compromisos serios, viables, no utopías y peroratas demagógicas para ganar votos a sabiendas que no podrán cumplirse las promesas de campaña.
Lo anterior vale tanto para los debates virtuales como para los encuentros presenciales en caso de que llegasen a organizar en las campañas que durarán del 19 de abril al 2 de junio.
Pero lo más importante es el contenido de las campañas que no debe ser impuesto por los partidos y los candidatos tan proclives a la denostación, la descalificación de los adversarios a falta de propuestas propias convincentes.
En este sentido los ciudadanos no debemos permitir que los institutos políticos y sus candidatos, muchos de ellos sin ideología, que han recorrido todo el arcoíris partidista, nos marquen la agenda de los temas a debatir en las próximas campañas y en los debates que se organicen virtuales o presenciales.
Los ciudadanos debeos exigir se aborden los temas que plateen la ruta de solución a los actuales grandes problemas económicos, sanitarios y ecológicos.
A los tabasqueños les interesa de los candidatos a diputados federales, legisladores locales y presidentes municipales conocer sus iniciativas de ley para desde la Cámara de Diputados federales, desde el Congreso local y las acciones desde las alcaldías enfrentar la crisis económica, la terrible pandemia del Covid-19 que llegó para quedarse y las recurrentes inundaciones.
Una vez conocidas las propuestas, la plataforma electoral de cada candidato a determinado puesto de elección popular, los ciudadanos debemos cotejar, evaluar lo plateado y discernir lo viable a lo demagógico.
Los electores debemos aprender a distinguir “qué” ofrece determinado candidato y “cómo” y “con qué” podrá llevarlos a la realidad para no ser timados electoralmente.
Deben pasar al basurero de la historia las ocurrencias de los “Cucos Rovirosa”, las mentiras de los Evaristos, las frivolidades y fracasos de los Villalpandos, toda la fauna política que por determinadas circunstancias llegaron a cargos públicos.
En esta ruta de seguimiento de las ofertas electorales de los aspirantes a diputados federales, locales y presidentes municipales, juegan un papel importante los sectores académicos, sociales y los propios medios de comunicación para orientar a los ciudadanos sobre la mejor propuesta de tal o cual candidato.
La última palabra, la decisión final la debe tener siempre el ciudadano, el elector que acudirá a la urna el próximo 2 de junio.

TIEMPO FUERA.- Quién no vote no tiene derecho alguno de exigir, criticar a los legisladores, alcaldes y sus políticas públicas.

sfernandez@ddt.mx