27/10/202000:03:00

La teja de Porfirio

27/10/202000:03:00

Para intentar unificar el sur de Grecia, la ciudad de Argos despertó invadida por un ejército de soldados resueltos a capturarla. Al frente de este ejército un general impetuoso, dispuesto a todo con tal de sojuzgar la ciudad: Pirro de Epirro.
Los habitantes enfrentaron a los invasores, lanzando en su contra lo que encontraron a su paso. Una mujer, viendo que el ejército invasor se salía con la suya, tomó una teja de barro y la aventó contra el primero que pasó a su lado. Era Pirro, que cayó mal herido para ser abatido finalmente por un soldado de Argos. No fue una muerte heroica la del considerado más grande general de todos los tiempos.
Dos años antes, en el 270 a.C., en la batalla de Heraklea, Pirro había enfrentado a la legión romana; la victoria conseguida por el Rey le generó 13 mil bajas en su ejército.
Consciente del daño que le generó a sus tropas esa victoria, lanzó la famosa frase que hasta la fecha identifica una victoria pírrica, considerada además como su epitafio: “Otra victoria como ésta y seremos destruidos”.
El pasado 24 de octubre el líder de los diputados federales en el Congreso de la Unión, Mario Delgado Carrillo, fue “nominado” como el nuevo dirigente de Morena, después de dos años de conflicto interno y que amenaza con extender su daño colateral a la elección intermedia del 2021.
Sea quien sea el líder de Morena en el país, recibe un partido ganador, con la Presidencia de la República como ícono del hombre que forjó este movimiento de izquierda: Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo la victoria por la vía de las encuestas -antes había perdido dos- no está generando las expectativas que la clase política del partido del Presidente se había planteado.
El candidato perdedor: Porfirio Muñoz Ledo, forjado en los terrenos de la alta escuela, ha decidido quedarse a dar la pelea en los tribunales y de paso generar una nueva Morena, como la que hizo con Cuauhtémoc Cárdenas en 1988.
La amenaza de Porfirio es como la teja de Argos: si el partido del Presidente llega a la elección intermedia con dos dirigencias en pugna, tendría una implicación electoral, similar a la que construyó Muñoz Ledo –junto al mismo AMLO- en el 88 con el Frente Democrático Nacional.
Minimizar la amenaza velada de Porfirio sería un error superior al mostrado por los morenos en las elecciones de Coahuila e Hidalgo.
La rebelión de la polilla está en marcha.

KYBALIÓN.- El PRD no tendrá problemas en postular candidatas a legisladoras locales por la vía uninominal.
En las plurinominales aparecen alistadas Carolina Pech y Violeta Caballero Potenciano, para arribar a la próxima camada legislativa.
Las mujeres de competencia real, que irán por la vía del voto directo, son encabezadas por la dos veces diputada Patricia Hernández Calderón en el Octavo Distrito.
Paty, a nivel de base, trae además de arrastre punch electoral, con una estructura impresionante que la ubica como una candidata dura de vencer en Centro. Vaya, no tendría problemas para competir por la Alcaldía, en caso que en una alianza priistas y perredistas no logren ponerse de acuerdo.